Otro año que se nos va.
Seguramente este 2013 trajo ocasiones de íntima felicidad y también, de penas varias. Nacimientos y perdidas; sorpresas y desencantos.
Y por eso, para algunos habrá sido un año memorable y para otros, un año que mejor se termine pronto.
Lo que importa (lo que realmente importa), es que estamos vivos y que la vida será aquello que dejemos que sea. Porque cada quien es el artesano de su propio destino.
De modo que para este año que se aproxima mi deseo es que tengamos paz. La paz que nos hace falta como género humano, como región, como país, como ciudad.
Los deseos son sólo eso si no los actuamos. Y no es posible alcanzar ninguna meta si no estamos en paz.
Por eso queridos amigos, seguidores y circunstantes, les deseo la Paz. Para ustedes y sus familias. Para todos nosotros.
Que seamos capaces de construir (y contribuir) a la Paz.
Brindo por ello.
Feliz 2014. Salud!
Muchas gracias por todo.
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